Desarrollo histórico (1791-1821)

Claustro de Consiliarios del 31 de enero de 1820

Presidió el rector. Se trató sobre el inconveniente que resulta de hacer la lectura de Cánones en la sala de exámenes secretos por la entrada que tiene a la Iglesia, y en consecuencia acordaron que se haga en lo sucesivo en la oficina de la secretaría, por no haber otro lugar desocupado.

Luego se leyó un oficio de doña Juana y de doña Gertrudis Lobo Guerrero, en que reclaman las compensaciones prometidas en atención a los servicios del finado bedel; se pasó el asunto al defensor universitario.