Delgado Delgado, Rodolfo
Nació en Teocaltiche, Jalisco, el 8 de julio de 1897. Fueron sus padres los señores José Refugio Delgado y María Delgado.
Cursó sus estudios preparatorios en el Liceo de Varones, en Guadalajara; participó con Enrique Díaz de León en el grupo literario Justo Sierra, y también colaboró en el semanario El Radical.
Realizó sus estudios profesionales en la Escuela de Jurisprudencia de Guadalajara (1914-1918), y recibió su título de abogado.
Fue jefe del Archivo General del Estado de Jalisco de 1915 a 1919; además de secretario del Juzgado Cuarto de lo Civil y de Hacienda; secretario de la Comisión Estatal Agraria.
En 1919 ascendió a juez de primera instancia con adscripción en Ocotlán, y fue defensor de oficio en materia militar. En 1920 se le nombró jefe de defensores de oficio y asesor de guerra, y para ocupar estos cargos se trasladó a la Ciudad de México.
Nuevamente en Guadalajara, en 1921 fue secretario de la Comisión Estatal Agraria. En 1922 fungió como subsecretario general del gobierno del estado de Jalisco y fue miembro de la Comisión Redactora de Legislación Militar. En 1923 fue juez del fuero militar en Guadalajara y en San Luis Potosí; en 1925 fue nombrado notario público en Guadalajara.
En 1926 ingresó como catedrático de la Universidad de Guadalajara, del 25 de febrero del citado 1926 al 29 de abril de 1927 impartió la cátedra de Procedimientos Mercantiles en la Facultad de Comercio, y del 1° de octubre de 1928 a agosto de 1929, la de Economía Política en la Facultad de Jurisprudencia.
En 1927 publicó su obra Cuentos del pueblo. En 1929 fue secretario general de gobierno del estado de Jalisco, y sustituyó al gobernador Margarito Ramírez en calidad de gobernador interino. En 1932 fue presidente de la Junta de Conciliación y Arbitraje del Estado de Jalisco, en 1933 fue secretario del Juzgado Primero de Distrito y para 1934, juez primero de distrito con carácter de interino.
Luego de fungir como secretario general del Comité Pro-Silvano Barba González, en 1925 fue jefe de la campaña política a la gubernatura estatal.
En 1937 se trasladó a Ciudad de México para ocupar la oficialía mayor del Departamento del Trabajo, más tarde fue electo diputado federal por el distrito electoral con cabecera en Ocotlán, postulado por el Partido de la Revolución Mexicana, en 1938 en su calidad de presidente de la Cámara de Diputados, contestó el informe presidencial del general Lázaro Cárdenas.
El 16 de noviembre de 1937, al rescatar la Real Cédula de Fundación de la Universidad de Guadalajara, la obsequió a su casa de estudio.
Una vez más en Guadalajara, fue jefe del Departamento del Trabajo y del Departamento de Economía y Hacienda del gobierno del estado de Jalisco; en 1939 fue electo diputado a la xxxv Legislatura local.
En febrero de 1940 integró la terna para elegir al rector de la Universidad de Guadalajara, y ocupó la rectoría del 8 de marzo del citado 1940 al 3 de marzo de 1943.
El 10 de junio de 1940 fue nombrado profesor titular de Derecho Administrativo segundo curso, en la Facultad de Jurisprudencia.
Durante su gestión rectoral restableció la Orquesta Sinfónica de Guadalajara –antes de la Universidad–, y en 1942 auspició la publicación del libro Anales de la Universidad de Guadalajara, y escribió la presentación.
Fue colaborador de la revista Bandera de provincias, en la cual publicó un artículo sobre la novela El campanario de Basilio Badillo. Pasó los últimos años de su vida retirado de toda actividad pública y se dedicó a la agricultura.
En Guadalajara, Jalisco, falleció el 7 de julio de 1952.