Palomera Velázquez, Carlos
Nació en Magdalena, Jalisco, el 16 de abril de 1921. Fueron sus padres los señores Rogelio Palomera Meza y Francisca Velázquez Huerta.
La instrucción elemental la cursó en la Escuela Primaria de Tequila, Jalisco. Ya establecido en Guadalajara, la secundaria la cursó en la Escuela Nocturna para Trabajadores, que dirigía el profesor Saúl Rodiles; de 1943 a 1945 estudió el bachillerato en el turno nocturno de la Escuela Preparatoria de Jalisco.
En 1945 ingresó a la Facultad de Medicina de la Universidad de Guadalajara, y se tituló como médico, cirujano y partero el 15 de diciembre de 1951, con la tesis “Flebotrombosis y tromboflebetis”, la cual mereció su publicación.
Su internado lo realizó en la Ciudad de México, en el Instituto Nacional de Cardiología, y se especializó en Nefrología, ahí fueron sus maestros los destacados médicos Arturo Rosenblueth y Hermann Villarreal.
Como catedrático de la Universidad de Guadalajara impartió Anatomía y Fisiología Humanas en la Escuela de Enfermería, a partir del 17 de septiembre de 1952; Introducción a la Medicina como interino a partir del 1° de enero de 1961 y como titular desde del 27 de febrero de 1962; Medicina General Cardiovascular en la Facultad de Medicina a partir del 1° de enero de 1963; Anatomía, Fisiología e Higiene en la Escuela de Enfermería a partir del 7 de mayo de 1960; fue jefe del Departamento Médico de Materias Básicas de Enfermería y Obstetricia en la Escuela de Enfermería, desde del 22 de diciembre de 1961; y fue instructor de la Clínica de Cardiología en su especialidad de Nefrología, del 15 de marzo de 1957 al 20 de febrero de 1968.
Los estudiantes lo apodaban el Potasio, por sus constantes referencias a este elemento químico sobre el riñón.
Se desempeñó en los siguientes cargos universitarios: secretario de la Facultad de Medicina de agosto de 1956 a febrero de 1968; y director interino y miembro de la Comisión de Admisión de Alumnos.
También fue médico de las Clínicas Generales números dos y tres del imss, médico consultor de los Ferrocarriles Nacionales y jefe de Nefrología y Enseñanza del Hospital Regional del imss, actual Hospital General número 45 Ayala.
En el Hospital Civil de Guadalajara fue promotor del laboratorio de investigación nefrológica, y de la bibliohemeroteca que actualmente lleva su nombre.
Se le consideró como el primer nefrólogo reconocido en Jalisco; introdujo en Guadalajara el proceso de diálisis e impulsó las vocaciones de incontables médicos tales como Alfredo de la Huerta, José Parra Carrillo y Gilberto Hernández Álvarez, entre otros. Su antiguo maestro, el doctor Hermann Villarreal, sintetizó así su labor: “Fue sin lugar a dudas la persona que más ha hecho por la Nefrología en Guadalajara”.
Los directivos del Instituto Nacional de Cardiología siempre consideraron fundamental su opinión para admitir candidatos procedentes de Jalisco para cursar especialidades en dicha institución.
Las asociaciones a las que perteneció fueron: la Sociedad Médica de Jalisco de la cual fue presidente, la Sociedad Jalisciense de Cardiología, el Club Rotario de Guadalajara y la Sociedad Venezolana de Cardiología, en calidad de miembro honorario.
Asistió a varios congresos nacionales e internacionales; en 1959 participó en las Jornadas Venezolanas de Cardiología. En la Facultad de Medicina de la República de El Salvador fue nombrado profesor honorario.
Falleció en Guadalajara el 14 de noviembre de 1970, y fue velado en el repartidor del Hospital Civil Fray Antonio Alcalde.
En 1976 fue declarado Hijo predilecto del municipio de Tequila, Jalisco, y se le dio su nombre a una calle de dicha población.