La quinta restauración de la Universidad de Guadalajara

Aprobación de la restauración de la Universidad de Guadalajara por el Congreso de Jalisco (1937)

Con dispensa de trámites el Congreso del Estado de Jalisco, presidido por el diputado Manuel Zepeda Castillo, aprobó de inmediato los siguientes artículos:1

  • Primero.- Se restablece en el Estado [de Jalisco] la “Universidad de Guadalajara”, que quedará integrada por las escuelas, institutos, talleres y demás dependencias que formaron la Dirección General de Estudios Superiores.
  • Segundo.- La Universidad se regirá por la Ley Orgánica de la Educación Superior, expedida el 23 de febrero de 1935.
  • Tercero.- Los estudios realizados en las dependencias de la Dirección General de Estudios Superiores, serán reconocidos como válidos por la Universidad.
  • Cuarto.- Se facultaba al Ejecutivo estatal para que de acuerdo a los fines que perseguía la educación socialista, modificara el artículo 2º del presente decreto, dándole las modalidades que exigían las circunstancias entonces vigentes, además expedirá el reglamento de la ley referida.

Y en un solo artículo transitorio, se daba el título de rector de la Universidad de Guadalajara al director general de Estudios Superiores.

Sobre los acontecimientos de la nueva restauración de la Universidad de Guadalajara, el licenciado Constancio Hernández expresó:

Las razones que, en mi carácter de diputado, tuve para pedir en el Congreso del Estado el restablecimiento de su nombre a nuestro Centro de Estudios, se perciben claramente con solo tomar en cuenta que nuestra Dirección de Estudios Superiores es la misma Universidad que reorganizó el Gobierno Revolucionario de José Guadalupe Zuno en el año de 1925, que por su origen de ninguna manera se ha desnaturalizado por el hecho de imprimirle las modalidades que el movimiento revolucionario ideológico de México requiere para su adelanto y perfección y sólo por una necesidad momentánea de política administrativa, siendo gobernador el licenciado Sebastián Allende, tuvo que variarle el nombre, pero es la misma Universidad, conserva su tradición y prestigio, y sólo faltan en su seno como aquellos que hubo necesidad de expulsar porque estorbaban torpemente su finalidades.2


Referencias
  1. Periódico oficial del gobierno del estado de Jalisco, núm. 25, tomo cxxxviii, 22 de julio de 1937, suplemento, p. 1. ↩︎

  2. Rafael Morán de León, “Sobre la apasionante Cuestión Universitaria de Jalisco habla el Rector de la Universidad de Guadalajara [Constancio Hernández Alvirde]”, Pensamiento Universitario, Guadalajara, Universidad de Guadalajara, núm. 3, Colección Fondos Serie Pensamiento Universitario, enero de 1998, pp. 7-8. ↩︎