Desarrollo histórico (1859-1860)

La Guerra de Reforma continuaba en todo su apogeo, los edificios del antiguo Colegio de San Juan Bautista y de la Universidad seguían convertidos en cuarteles, y en tanto el rector titular José María Nieto del Portillo no se presentó en Guadalajara, por lo que fungió como décimo noveno rector Casiano Espinoza y Dávalos.

Claustro de Doctores del 15 de marzo de 1859 ¹

Reunidos el rector y once doctores en la Capilla de San Francisco Javier.² La comisión designada para la recepción del archivo universitario hizo presente que lo había recibido por el inventario que se le presentó, mas no por el que se había hecho la entrega, en razón de que leído éste por don Ignacio Acal –último secretario del Instituto–, manifestó que no lo había recibido por inventario de su antecesor. Al igual la comisión nombrada para recibir la tesorería, dio cuenta de los resultados de su encargo. Por oficio, el síndico tesorero hizo presentes algunas dificultades que se le ofrecían para el cobro de las rentas de unas piezas anexas al edificio de la Universidad, en cuyo arrendamiento se habían hecho algunas alteraciones y celebrado contratos, pasó el asunto al Claustro de Hacienda.

El reverendo padre Isidro Gazcón propuso examinar a los jóvenes que se presentaran a recibir los grados menores, nombrando por riguroso turno a los examinadores; se rechazó la propuesta por las múltiples dificultades que presentaría, ya que no se dieron las principales lecciones por falta de local, y era muy difícil en tales circunstancias el arreglo y la autorización de los derechos. El doctor Juan Nepomuceno Camarena propuso que se facultara al señor rector para que decidieran las funciones de grados menores en casos necesarios para grados mayores, así se aprobó.

Claustro de Doctores del 29 de marzo de 1859

Presidido por el rector y con la asistencia de doce doctores, en la Capilla de San Francisco Javier. Se dio a conocer una comunicación del doctor Ignacio Mateo Guerra, en la cual participaba que tomó posesión de la dignidad catedralicia de maestrescuelas, la cual era concurrente con el oficio de cancelario universitario, por lo que el Claustro acordó recibirlo con esta investidura el día 31.

Se acordó que los exámenes de la Facultad de Medicina se celebrarían de acuerdo con las disposiciones legales de 1854, el doctor Pablo Gutiérrez se reservó su voto. Teniendo presente que sólo había tres catedráticos de Medicina y que según el reglamento vigente debían ser cinco los examinadores, para llenar este vacío se autorizó al rector para que nombrara a dos profesores de la Universidad. Y se recibió solicitud del secretario Antonio Alcocer, que estando enfermo pidió que de acuerdo con las constituciones se le conservara su sueldo, dado el estado de las finanzas sólo se entregaría la mitad.

Expedición de las Leyes de Reforma (1859)

A partir del 12 de julio, desde el Puerto de Veracruz, el presidente de la república Benito Juárez expidió las Leyes de Reforma, que prescribían la nacionalización de los bienes de la Iglesia. Respecto de la separación del Estado de la Iglesia, “el gobierno –decía la ley– se limitará a proteger con su autoridad el culto público de la religión católica, así como el de cualquier otra”, además se suprimían las órdenes religiosas, se declaraba el matrimonio como contrato civil, se establecía el registro civil y se secularizaban los cementerios. ³

Claustro de Doctores del 23 de agosto de 1859

Presidido por el rector y con la asistencia de siete doctores. Se dio cuenta de un oficio del gobernador y comandante general del Departamento, Leonardo Márquez, en el que transcribe la protesta que había dirigido al Supremo Gobierno de la Nación contra las leyes subversivas contra la religión y de todo orden social publicadas por don Benito Juárez, pedía al Muy Ilustre Claustro que emitiera su opinión sobre la materia. Por lo que el señor rector nombró una comisión compuesta por tres doctores que formaban el pleno de la Universidad: por Teología el doctor José María Gutiérrez, por Cánones y Leyes el doctor Rafael Sabás Camacho y por Medicina y Filosofía el doctor Antonio Pacheco Leal.

Claustro Pleno del 27 de agosto de 1859

En la Capilla de Nuestra Señora de Loreto reunidos el rector y veintiún doctores. La comisión nombrada dio cuenta con la exposición y proposiciones, en que concluyó con la protesta contra las leyes y decretos expedidos por don Benito Juárez, quien se decía presidente de la república. Leídas y aprobadas por todos, las firmaron.

Al debatir las posiciones liberales los doctores de la comisión no dudaron incluso en citar a Voltaire, o cuando presentaron su desacuerdo por la protección que brindaría el Estado a la religión católica y a todas las demás, expresaron: “No exageramos pues al decir que la demagogia protege hasta las idolatrías y los sacrificios humanos”. ⁴

Y concluyeron con las siguientes proposiciones:

1. Se protesta contra la expedición de las leyes dictadas por don Benito Juárez,

   en todo aquello que en dichas producciones propende a destruir en México la unidad católica, no reconoce más que los desahogos del favor de la demagogia que insulta a la sociedad creyente porque en ella encuentra un obstáculo insuperable para realizar sus proyectos traidores e impíos. ⁵
   

2. Y se desconoce a don Benito Juárez como presidente de la república y sólo reconoce al Supremo Gobierno de la Nación, establecido por el Plan de Tacubaya.

Claustro Pleno del 10 de noviembre de 1859

Presidido por el rector y con la asistencia del cancelario y veinte doctores en la Capilla de Nuestra Señora de Loreto, para realizar la elección rectoral. Celebrada la misa del Espíritu Santo se expresó que en virtud de una orden suprema del 30 de octubre de 1841, ya no era atribución del Claustro de Consiliarios elegir al rector, sino del pleno.

En la primera votación el doctor Juan Nepomuceno Camarena recibió nueve votos, el doctor José Gutiérrez Guevara cuatro, el doctor Orozco tres, el doctor Casiano Espinosa dos y el doctor Ignacio Mateo Guerra uno, por lo que nadie alcanzó la mayoría necesaria. Se procedió a la segunda votación, en la cual resultó con doce votos el doctor Juan Nepomuceno Camarena y con cinco el doctor José María Gutiérrez Guevara, por lo tanto quedó electo el primero de ellos, quien después de dar las gracias se excusó de aceptar el cargo, sin embargo no se consideraron suficientes sus excusas y se le declaró canónicamente electo.

Enseguida prestó juramento, y tomó el asiento que corresponde a su dignidad. Luego se eligieron consiliarios a los doctores Gutiérrez Guevara y Orozco por Teología, Francisco Arias y José Manuel Ramírez por Cánones y Leyes, Pablo Gutiérrez por Medicina y Antonio Pacheco Leal por Filosofía.

Claustro de Doctores del 12 de noviembre de 1859

Presidido por el rector y con la asistencia del cancelario y diecisiete doctores. Se procedió a prestar al rector el juramento, hecho a nombre de todos por el doctor José María Orozco y por los oficiales y dependientes universitarios el capellán Benigno Herce.

Claustro de Doctores del 17 de diciembre de 1859

Presidido por el rector y con la asistencia del cancelario y ocho doctores. Se dio cuenta de una comunicación del Supremo Gobierno del Departamento presidido por el general Adrián Woll, dirigida al rector en la que se le pedía que informara lo necesario acerca de un proyecto para crear una asociación médica; se leyeron las bases y se integró una comisión para estudiarlo, con los doctores Rafael Camacho, José María Gutiérrez y Antonio Pacheco Leal.

Claustro Pleno del 22 de diciembre de 1859

Presidido por el rector y con la asistencia de diez doctores. Se leyó el dictamen de la comisión nombrada para opinar acerca de la Sociedad Médica, en el cual concluían que no había ningún inconveniente para su integración, así se aprobó.

Celebración del Tratado McLane-Ocampo y la oposición de la Universidad

El 1° de diciembre de 1859, Robert McLane, en representación del gobierno de Estados Unidos de América, y Melchor Ocampo, por el gobierno de Benito Juárez, firmaron el tratado que lleva sus nombres, por el cual se concedía a Estados Unidos derechos de tránsito a perpetuidad por tres vías: una por el Istmo de Tehuantepec, otra de Nogales u otro punto fronterizo cercano a Guaymas y otra más desde Camargo y Matamoros u otro punto del Río Grande hasta Mazatlán:

En el caso excepcional de peligro imprevisto o inminente para la vida o las propiedades de ciudadanos de los Estados Unidos, quedan autorizadas las fuerzas de dicha República para obrar en protección de aquellas, sin haber obtenido previo consentimiento, y se retirarán dichas fuerzas cuando cese la necesidad de emplearlas; la fijación de los derechos aduanales en los pueblos de las tres vías antes citadas sería al arbitrio norteamericano. ⁶

En la siguiente sesión del Claustro de Doctores se fijó la posición de la Universidad ante la celebración del Tratado.

Claustro de Doctores del 31 de enero de 1860

Presidido por el rector y con la asistencia de siete doctores. El prosecretario Antonio Pacheco Leal leyó una circular del Supremo Gobierno del Departamento de Jalisco, en la cual comunicaba la protesta que el gobierno nacional había dirigido al de Estados Unidos de América, con motivo del convenio celebrado con don Benito Juárez, siendo muy justo que todas las corporaciones secundaran a su vez el juicio emitido con tanta energía por el Supremo Gobierno de la Nación. El señor rector nombró una comisión integrada por los doctores Pío González y Pedro Covieya para que redactaran la adhesión a la protesta.

Enseguida el rector hizo presente que había que reparar la iglesia, algunas piezas del edificio universitario y muebles, se le facultó para que tomara las medidas necesarias. El rector también manifestó que era muy conveniente que los estudiantes antes de acceder a las Facultades se graduaran de bachilleres, y además determinar los derechos por tal grado y la distribución por los mismos, se nombró una comisión para estudiar la propuesta con los doctores Orozco, Gutiérrez, Rafael Camacho y Antonio Pacheco Leal. Y por último, el rector informó que el síndico tesorero presentó las cuentas desde la restauración de la Universidad y se enviaron para su examen al doctor Germán Villalvazo.

Claustro de Doctores del 8 de febrero de 1860

Presidido por el rector y con la asistencia del cancelario y doce doctores. Celebrado para conocer la protesta formulada por la comisión, contra el Tratado McLane-Ocampo al que consideraron:

Que entraña la pérdida en este suelo de nuestra adorable religión, de nuestro idioma, de nuestras costumbres, de nuestra independencia y nacionalidad, bienes tan caros y preciosos para todo mejicano que no sea indigno de éste nombre que si por más desgracia llegaran los traidores a conseguir sus pérfidos designios los requerimos humildemente antes de llevarlos a cabo, transportarán a alguna isla desierta a todos los mejicanos que no estamos en conciencia con su traición, pues siguiendo la máxima del filósofo más grande de la Grecia, preferimos la libertad en una tierra extranjera a la servidumbre en nuestros antiguos lugares [...] ⁷

Esta protesta se aprobó por unanimidad de votos y fue firmada por todos los presentes.

La firma de este Tratado llegó a ser considerada como el acto definitivo para inclinar la balanza a favor de los liberales:

La batalla diplomática por ganarse el favor de los Estados Unidos, la perdieron los conservadores al negarse rotundamente a hacer concesiones territoriales; con algunos recursos diplomáticos podrían haber conseguido algo de los norteamericanos. Los liberales, en cambio, gracias al discutido Tratado Mc Lane Ocampo, lograron puertas abiertas de la ayuda norteamericana. ⁸

De aquí el gran interés de los conservadores por difundir lo más que se pudiera el polémico tratado, y a lo cual contribuyó el Claustro universitario.

Se continuó con los asuntos de la sesión del Claustro. La comisión, integrada por los doctores José Cayetano Orozco, Rafael Camacho, José Gutiérrez Guevara y Antonio Pacheco Leal, presentó el siguiente dictamen con las siguientes propuestas:

1. Los estudiantes que pretendieran abrir matrícula para cursar Teología, Jurisprudencia o Medicina recibirán primero el grado de bachiller sujetándose al examen acostumbrado y exhibiendo los derechos fijados por el “Reglamento Lares”.
2. Los estudiantes que a la fecha de este acuerdo, exhiban certificación según la “Ley Lares”, la Universidad les expedirá sus títulos.
3. A los que estuvieron en el primer caso el señor rector les señalará un término prudente para recibir el grado de bachilleres.
4. Los estudiantes que estuvieren en el caso de la propuesta anterior, harán profesión de fe.
5. Los estudiantes de Farmacia al recibirse de profesores pagarán setenta y ocho pesos por derechos.

Luego el rector nombró tres comisiones, compuestas cada una por tres doctores para consultar: el número de cátedras a establecer en cada Facultad; los autores de los libros de texto; cómo ha de distribuirse el tiempo de las lecciones para que se enseñen los cuatro cursos; y el sueldo de los catedráticos. Las comisiones se integraron con los doctores Juan Nepomuceno Camacho, Orozco y Gutiérrez por Teología; Ignacio Mateo Guerra y Francisco Arias por Cánones y Leyes; y Pablo Gutiérrez, Leonardo Oliva y Antonio Pacheco Leal por Medicina. Y por último, se facultó al señor rector para que estudiara la jubilación del secretario Antonio Alcocer.

El 18 de febrero se jubiló al secretario de la Universidad Antonio Alcocer, y se nombró para sustituirlo al licenciado Santiago Romero, quien prestó juramento de estatuto.

Reestructuración de las cátedras universitarias (1860)

Ese mismo día se aprobaron los “Dictámenes presentados por las comisiones nombradas por el Ilustre Claustro para el arreglo de las cátedras en esta Nacional Universidad en febrero del año de 1860”. ⁹

Las cátedras y sus titulares serían:

Facultad de Teología

• Teología Dogmática, el doctor José María Cayetano Orozco.
• Teología Moral, el reverendo padre fray Ignacio de Jesús Cabrera de la orden franciscana.
• Concilio y Disciplina Eclesiástica, el doctor Rafael Sabás Camacho.

Facultad de Derecho

• Derecho Natural, Romano y Patrio, el licenciado Francisco Camarena.
• Derecho Canónico y Público Eclesiástico, el licenciado Remigio Tovar.
• Práctica Forense y Derecho Internacional, el licenciado José Joaquín Castañeda.

Facultad de Medicina

• Anatomía General y Descriptiva el doctor Eufemio Alonso.
• Patología General e Interna, Clínica Interna y Medicina Legal el doctor y maestro Antonio Pacheco Leal.
• Química, Botánica, Farmacia, Terapéutica y Materia Médica el doctor Leonardo Oliva.
• Clínica y Patología Externas, Obstetricia, Medicina Operatoria, Aparatos y Moral Médica el doctor Pablo Gutiérrez.

En cuanto a los libros de texto se llevarían: en Teología Dogmática y Moral el de Billuart; en Lugares Teológicos el de Melchor Cano; en Concilio y Disciplina eclesiástica el Tercer Concilio Mexicano anotado por Arrillaga y la bula Auctorem fidei explicada por Espinosa; en Derecho Natural el de Zallinger; en Derecho Romano el de Vinnio; en Derecho Patrio el de Sala; en Derecho Canónico el de Soglia; en Derecho Público Eclesiástico el de Du Lac; en Práctica Forense y Derecho Internacional el de Sala; en Anatomía General y Descriptiva el de Boscasa; en Fisiología el de Beclard; en Higiene el de Londé; en Patología General el de Chomel; en Patología Interna el de Valleix; en Clínica Interna y Medicina Legal el de Mata; en Química el de Pelouze; en Botánica el de Bustamante; en Farmacia el de Lecanu; en Terapéutica el de Trosseaux; en Materia Médica el de Oliva; en Clínica y Patología Externas el de Vidal; en Obstetricia el de Caseaux; en Medicina Operatoria el de Malgaigne; y en Aparato y Moral médica el de Simón.

Claustro de Doctores del 29 de febrero de 1860

Presidido por el rector y con la asistencia del cancelario y once doctores. A moción de los doctores Leonardo Oliva e Isidro Gazcón, el señor rector hizo saber al Claustro que bien podría procederse a la apertura de las cátedras en la semana siguiente, se señaló el domingo inmediato cuatro de marzo para la solemne inauguración, se facultó al señor rector para mandar hacer los convites y realizar los demás preparativos. Y finalmente se estudió la glosa que hizo el señor Germán Villalvazo de las cuentas del síndico tesorero.

Solemne reinauguración de las cátedras (1860)

Y como estaba previsto, con un solemne acto académico, el 4 de marzo se reanudaron las cátedras. Dicho acto fue presidido por el gobernador Adrián Woll y en el cual hicieron uso de la palabra en prosa y en verso, respectivamente, los estudiantes Luis Gutiérrez Otero y Onofre Valadez. ¹⁰

El 6 de marzo, por instrucciones del rector, el secretario de la Universidad escribió al encargado del Hospital de Belén, Dionisio Rodríguez:

Hoy han comenzado las lecciones que se dan en esta Universidad sobre la ciencia médica, y como uno de sus importantes ramos [es] el de la Clínica y Cirugía, cuyo estudio no se puede hacer provechosamente sino contando con los elementos que proporciona el Hospital de Belén […], me honro en avisarle que a los Sres. Catedráticos, Dres. D. Antonio Pacheco Leal y D. Pablo Gutiérrez se les pueden facilitar los medios conducentes para obtener el fin que antes he indicado, como siempre ha sido de costumbre. ¹¹

Sin embargo, las actividades escolares se realizaron de forma muy irregular entre los sobresaltos de la guerra. El 24 de mayo el general José López Uraga al frente de las fuerzas liberales asaltó la ciudad, pero fue herido y hecho prisionero. El 26 de septiembre el general Jesús González Ortega la sitió, el 27 la ciudad fue sometida a un intenso fuego de los cañones, lo cual produjo gran pánico, muertes y destrucción. Finalmente, el 3 de noviembre el gobernador Pedro Ogazón se hizo del control de Guadalajara. ¹²